lunes, enero 17, 2011

Arthur Schopenhauer, contra la metafísica para el pueblo

Arthur Schopenhauer (1815) por Ludwig Sigismund Ruhl.
"...el optimismo no sólo es una falsa sino también perniciosa doctrina, por que éste presenta la vida como un deseable estado y a la felicidad como su esencia y objeto. Partiendo de esto, cada cual puede creerse como el más legitimado para proclamar la felicidad y la alegría. Si, como usualmente pasa eso no le entra en el lote, creerá que sufre una injusticia, y de hecho perderá el punto de equilibrio de su existencia; en vez de todo esto, mucho más correcto es recordar el trabajo, la privación, miseria, y sufrimiento, coronada por la muerte, como la verdadera esencia y objeto de nuestra vida (tal como afirman Brahmanismo y Budismo, y también el genuino Cristianismo), y que el triunfo consiste en negar a esa voluntad-de-vivir. En el nuevo testamento, el mundo es presentado como un valle de lágrimas, la vida como un proceso de purificación, y el símbolo del Cristianismo es un instrumento de tortura."

"El mundo como voluntad y representación" - Vol. II Arthur Schopenhauer

13 comentarios:

Justo dijo...

Y digo yo, echando mano de la sabiduría popular: ¿no estará en el término medio la virtud?

Uno dijo...

Vera (Rita Hayworth) lo decía (cantaba) en Pal Joey:
I was reading Shopenhauer last night
And I think that Sopenhauer was right.
Y yo si lo dice Rita...

Blanca Oraa Moyua dijo...

A mi me parecia interesante Schopenhauer, pero ahora empiezo a dudarlo.

Joaquinitopez dijo...

Es lo más sensato que he leído en mucho tiempo precisamente por ser lo más destructivo.
Un abrazo.

senses and nonsenses dijo...

la metafísica es de lo poco verdaderamente democrático que hemos alcanzado. podemos creernos felices, y podemos creernos desgraciados. apocalípticos o integrados.

sólo le ha faltado decir: que dios nos coja confesados.....

un abrazo.

Champy dijo...

Veo me entero y siento.....y me da una de arrepentimientos.... por dudar.
En la Puta de Babilonía gracias a Dios nunca he creído....pero al ver la situación.... sentirme optimista me parece egoismo.

2046

tecla dijo...

Ni tanto ni tan calvo. No me acaba de convencer Schopenhauer. Tampoco las religiones y menos el cristianismo ni el islamismo, ni ninguna religión. Aquí estamos. Y la Vida es como es. Un regalo de la Naturaleza y le debemos de estar agradecidos por todo cuanto nos da.
Y si no fuera así, acabaríamos suicidándonos. No la queremos perder porque la amamos.
Y eso es todo.
Gracias P. Jota
Leerte es un lujo a nuestro alcance.

Xim dijo...

El matiz de éste parrafo radica en que aporta el detalle de "genuino" cristianismo, ¿alejándose quizás del cristianismo oficial? y que yo sepa el budismo y brahmanismo lo que hacen es abogar por la suma "indiferencia" frente a todos los sentimientos, es decir, no se inclinan por el optimismo ni por el pesimismo, los eluden ambos... Muy subjetivo el señor este...

MM de planetamurciano dijo...

Hace unos años hubiese dicho ke este tío deliraba. Ahora le daría totalmente la razón.

ixilik dijo...

La verdad es que el hombre , no es "la alegria de la huerta"...
He leido supuestamente de él "Las religiones, como las luciernagas, neceitan de la oscuridad para brillar"

@ELBLOGDERIPLEY dijo...

Yo también creo que en el término medio está la virtud. Eso de que el optimismo es una perniciosa doctrina, pues que iba decir el hombre, si era filósofo y feíllo:-).
Un "flower power" tampoco, es verdad, a no ser que nos guste mucho Salou, como a la chica esa del Gran Hermano.
Petons, nen.

Mery dijo...

Siempre sentí una cierta rebeldía a ese sentimiento del valle de lágrimas.
¿Para ésto hemos venido al mundo? No cabría la ilusión, los sueños, la esperanza.
Yo me niego a ello, no me gusta Schopenhauer.

Madame X dijo...

Si observamos el mundo con detenimiento, las palabras de Schopenhauer cobran vigencia. Somos una minoría privilegiada que entramos en depresión cuando no somos felices, mientras la inmensa mayoría sólo tiene tiempo para sobrevivir a duras penas.

Por lo demás, Schopenhauer me cae bastante mal por su misoginia.