lunes, junio 16, 2008

Federico García Lorca, el grito de la sangre

Federico García Lorca con 18 años, fotografiado por Rogelio Robles Romero-Saavedra

YERMA. Eso nunca. Nunca. (Yerma da un grito y aprieta la garganta de su esposo. Éste cae hacia atrás. Yerma le aprieta la garganta hasta matarle. Empieza el Coro de la romería). Marchita, marchita, pero segura. Ahora sí que lo sé de cierto. Y sola. (Se levanta. Empieza a llegar gente.) Voy a descansar sin despertarme sobresaltada, para ver si la sangre me anuncia otra sangre nueva. Con el cuerpo seco para siempre. ¿Qué queréis saber? No os acerquéis, porque he matado a mi hijo. ¡Yo misma he matado a mi hijo!

Según el investigador Miguel Francisco Caballero "El asesinato de Lorca huele a sudorina y a lo peor de una época: rencillas personales, tierras y homofobia". En el asesinato de García Lorca confluyeron causas tanto económicas como políticas y de rencillas familiares puras y duras, nacidas de la rivalidad con la familia Roldán y Alba por cuestiones de tierras adquiridas a medias.
Este enfrentamiento llegará a su cima con la publicación de "La Casa de Bernarda Alba" en la que el poeta fotografiará a estas familias. Y serán justamente los primos de Lorca, los Roldán el brazo ejecutor de la ignominia.
García Lorca, antes del comienzo del golpe militar, estaba invadido por la angustia y el terror, y tenía visiones de los campos de España que se abrían llenos de muertos. Este terror que le inmovilizará será fundamental en el devenir de los acontecimientos, ya que le impedirá mantener la lucidez necesaria, y le llevará a cometer el trágico error que acabará con su ejecución.



"Lorca, El Mar deja de Moverse" Película de Emilio Ruiz Barrachina, que se estrenó el 27 de septiembre de 2006
Federico García Lorca, era un hombre pronunciado políticamente a favor de la República y que había cosechado bastantes enemigos debido a la envidia nacida de su indudable éxito. Gran parte de estas envidias y odios se concentraban justamente en Granada, ciudad a la que se dirigió desde Madrid el 16 de julio de 1936, para estar a salvo como le dijo a su tutor, Antonio Rodríguez Espinosa, tras enterarse por el poeta Juan Gil-Albert del asesinato de Calvo Sotelo; en vez de partir rumbo al exilio como la mayoría de sus amistades y de la intelectualidad española. Es como si paso a paso se fuera representando un drama escrito por él mismo.

"Yo soy español integral y me sería imposible vivir fuera de mis límites geográficos; pero odio al que es español por ser español nada más, yo soy hermano de todos y execro al hombre que se sacrifica por una idea nacionalista, abstracta, por el sólo hecho de que ama a su patria con una venda en los ojos. El chino bueno está más cerca de mí que el español malo. Canto a España y la siento hasta la médula, pero antes que esto soy hombre del mundo y hermano de todos. Desde luego no creo en la frontera política".

Declaración al Sol de Madrid

Será en ese fatídico tren, que le lleva de vuelta a Andalucía, donde Ramón Ruiz Alonso, ex -diputado de la CEDA, y conocido como “el obrero amaestrado” le reconocerá desencadenando de esta manera el terrible desenlace, era como la victima propiciatoria que se entrega en manos de sus ejecutores, una burguesía granadina conservadora que le odiaba profundamente y a la cual él había retratado como “la más ignorante de Europa”.

Llegado a Granada al comienzo del golpe, y habiendo sido amenazado en su casa (le trataron de "maricón" porque no supieron encontrar una injuria peor), él se refugió en casa de su amigo el poeta Luis Rosales, que era un alto exponente de la Falange. Rosales le aseguró su protección, pero el diputado de la CEDA, Alonso, que odiaba a Rosales no menos que a Lorca, consiguió detener a este último en casa de Rosales, mientras que Luis estaba en misión.

La tarde del 16 de agosto se acerca un automóvil a la casa de los Rosales. Ninguno de los hombres de la familia se encuentra en casa. Del carro se apean Ramón Ruiz Alonso, el ex-diputado de la CEDA; Juan Trescastro, miembro de la familia Roldan; Luis García Alix; Sánchez Rubio y Antonio Godoy, el Jorobeta.

Tocan a la puerta. Doña Esperanza se asoma.

-Tengo orden de detener a Federico García Lorca que ustedes tienen escondido aquí-sentencia Ruiz Alonso.

Doña Esperanza protesta. Los convence de que no se lleven al poeta hasta que uno de sus hijos esté presente.

Lorca está en su habitación, baja las escaleras-Esto es un error, un abominable error exclama.

-Vamos-dice Alonso.

Federico es trasladado al edificio del gobierno civil. Al entrar es golpeado con la culata del mosquetón por un guardia de asalto. La acusación formal proviene de Ruiz Alonso. Se le acusa de “espía ruso”. La acusación, totalmente ridícula, es sólo el pretexto para eliminarlo. Miguel Rosales, hermano de Luis, quien acompañó a Federico al gobierno civil, se alarma. Doña Esperanza había conseguido que no se llevaran a Lorca hasta que uno de sus hijos estuviera presente. Ya en el edificio del gobierno civil Miguel Rosales pide que no se le lleve al poeta a los “interrogatorios”, sabiendo el atroz resultado de estos. Cayendo la tarde los García Lorca enfrentan la noticia del fusilamiento de Fernández de Montesinos, Concha, hermana de Federico es ahora viuda de Fernández Montesinos.

A su regreso, Rosales intentó liberar a su amigo, pero no solamente no lo consiguió, sino que tuvo que disculparse ante el comandante militar de Granada, un tal Valdés -criminal común que tenía oficio de capitán o coronel-, de la acusación de haber ofrecido refugio a un exponente del marxismo leninista. Quien decretó el fusilamiento de Lorca fue Valdés, tras haber consultado telefónicamente al general Queipo de Llano, que ordenó a Valdés darle al poeta "mucho café". Lorca fue llevado a Viznar y fusilado con dos banderilleros y un maestro de escuela en la madrugada del 19 al 20 de agosto de 1936. Su cuerpo nunca fue recuperado. Juan Luis Trescastro de Medina, pariente del padre de Lorca al estar casado con una prima de este perteneciente a la familia Roldán, se precipitó en un bar de Granada, y dirigiéndose al pintor Gabriel Morcillo, que estaba allí con un grupo de amigos, le comentó: "Acabamos de matar a vuestro amigo, el poeta, yo le he disparado dos tiros en el...... a aquel maricón".

Barranco de Viznar ( Granada )

Pero tal vez en estos momentos en que la realción entre Federico García Lorca y Salvador Dalí esta siendo llevada a la pantalla de la mano del director Paul Morrisson en la película que de momento llevará por titulo "Little Ashes"( Pequeñas Cenizas ), sería bueno leer lo que Dalí opinó en su método, paranoico-crítico, sobre estos acontecimientos:

"Muerte de Federico García Lorca, ametrallado en Granada. Suicidio de René Clavel en Paris y de Jean Michel Franc en Nueva York. Muerte del surrealismo. Muerte del Principe M`Diván guillotinado por su Rolls. Muerte de la Princesa M`Diván. Muerte de Sigmund Freud, desterrado en Londres. Doble suicidio, a raíz de un pacto, de Stefan Zweig y su mujer. Muerte de la Princesa de Faustine Lusinge. En el teatro, la de Christian Berard y la de Louis Jouvet. Muerte de Gestrude Stein. Muerte de José María Sert. Muerte de Misia y de Lady Mendl. Muerte de Robert Desnos y de Antonin Artaud. Muerte del existencialismo. Muerte de mi padre. Muerte de Eluard. Muerte de Stalin.
Tengo la seguridad de que mis cualidades de psicólogo analista son superiores a las de Marcel Proust. No sólo por tener a mi disposición el psicoanálisis entre los demás métodos que él desconocía, sino ante todo porque la estructura de mi espíritu es de un tipo eminentemente paranoico, el más indicado para este género de actividades, mientras que el suyo era el de un "neurótico depresivo". Es decir, el "menos apropiado". Esto se nota hasta en sus bigotes distraídos y depresivos, que al igual de los ultra-depresivos de Federico Nietzsche, son completamente opuestos a los bigotes alegres de Velásquez o de los ultra-rinocerontescos de vuestro genial servidor.
Es cierto que siempre me ha gustado valerme de sistemas peludos (ya sea en la estética para determinar la proporción de oro, según el brote de pelo o en el campo psicopatológico del bigote, esa constante trágica del carácter, sin duda la más truculenta del rostro masculino).
Es aún más cierto que si tanto me gusta valerme de términos gastronómicos para hacer tragar mis ideas filosóficas, de difícil y laboriosa digestión, exijo siempre una limpidez feroz de cada pelo; ni la más mínima falta de claridad será tolerada.
Es por eso que me gusta decir que Marcel Proust, con su introspección masoquista y su descortezamiento sádico de los demás logró hacer una especie de sopa de langostas prodigiosa, impresionista, super-sensible y casi musical, donde éstas no existirían por así decirlo, más que en esencia. Mientras que Salvador Dalí, al contrario, de todas las esencias y quintaesencias más imponderables de sus auto-descortezamientos, y de los otros que no son jamás sus semejantes, consigue ofrecerles, en un plato deslumbrante y sin un pelo de conocimiento, nada menos que una auténtica langosta nadando, concreta, articulada y reluciente cual armadura comestible.
Proust, de la langosta, logra producir música. Dalí, de la música misma, logra producir langostas.



Pasemos ahora a la muerte de los contemporáneos que he conocido y que han sido amigos míos, como ya he dicho antes. Mi primer sentimiento es un sentimiento tranquilizador de que esos muertos se vuelven tan Dalinianos que van a trabajar en las mismas fuentes de mi obra. Pero enseguida, otro sentimiento inquietante y paradójico se manifiesta, y es que yo soy la causa de su muerte.
Mi delirio de interpretación paranoica, sin yo solicitarlo, llega a entregarme las pruebas más minuciosas de mi responsabilidad criminal. Pero ya que eso es objetivamente falso, y que además yo estoy por encima de todo, casi inhumanamente inteligente, todo termina bien. Y es por eso que puedo confesarles con melancolía, desnudo de toda vergüenza, que cada nueva muerte de un amigo, sobreponiéndose en capas finísimas de "sentimientos falsos de culpabilidad", termina por formar una especie de almohadón blandísimo en el cual me duermo cada noche con más frescura y menos angustia.
Muere ametrallado en Granada el poeta de la mala muerte, Federico García Lorca. ¡Olé! Esto es lo que exclamé en París, en mi apartamento del número 8 de la rue de I'Université, al enterarme de la muerte de Lorca, el mejor amigo de mi adolescencia.
Esta exclamación que se produce biológicamente para rematar un pase en la corrida, o en el jaleo del cante jondo, y que grité en la ocasión de la muerte de Lorca, encarna todo el inocultable españolismo del éxito trágico de su destino.

A lo menos cinco veces al día Lorca hacía alusión a su muerte. En la noche no podía irse a dormir sin que varios de sus compañeros fuésemos a acostarlo. Una vez en la cama, eternizaba las más trascendentales conversaciones poéticas que ha habido en nuestro siglo. Casi siempre volvía al tema de la muerte y sobre todo al de su propia muerte.
Lorca imita y canta todo lo que dice, primero y ante todo, canta su muerte y la imita. La remeda y la escenifica. "Así, decía, estaré en el momento de mi muerte!" Después, se estremecía su cuerpo al descender el cortejo fúnebre por una agreste colina de Granada; y cinco días después de su muerte, se arregla para que su rostro, que no era hermoso, se aureolara de una belleza desconocida, de una hermosura excesiva. Luego, seguro del efecto inesperado que había producido en nosotros, se sonrío con una sonrisa radiante, sonrisa que brotaba de la absoluta posesión lírica de sus espectadores. Lorca había escrito:
"El río Guadalquivir tiene las barbas granates.
Granada tiene dos ríos, uno llanto, el otro sangre".
También, al fin de la Oda a Salvador Dalí (dos veces inmortal), Lorca hace alusión inequívoca a su propia muerte, y me pidió que no la mirara mientras florecieran mi vida y mi obra.
La última vez que ví a Lorca fue en Barcelona, dos meses antes de la guerra civil. Gala, que no lo conocía, se quedó atónita ante ese fenómeno glutinoso y de un lirismo total. Este sentimiento, además, fue recíproco; durante tres días, Lorca no me habló sino de Gala

También Edward James, poeta inmensamente rico y super-sensible como un picaflor, quedó preso e inmovilizado en la personalidad glutinosa de Lorca. James vestía un traje tirolés excesivamente bordado, de pantalón corto y camisa de encajes. Lorca decía de él que era un picaflor vestido de soldado de la época de Swift (Gulliver).
Durante una comida en el Canari de la Garriga atravesó el mantel con paso militar un insecto diminuto y extraordinariamente bien vestido. Lorca lo vio de repente y lanzó un grito pero, sujetándolo con un dedo le ocultó a James la identidad del bicho. Al retirar el dedo no quedaba ni huella del insecto. Pues bien, fue ese pequeño insecto, también poeta y vestido de encajes tiroleses, el único que nos hubiera podido explicar su destino.
En efecto, James acababa de alquilar la Villa Chimbrone, cerca de Amalfi, donde se inspiró Wagner para componer el Parsifal y nos invitó a mí y a Lorca a vivir allá todo el tiempo que quisiéramos. Por tres días Lorca se torturó con alternativas de angustia: ¿Iría o no iría ? Cada cuarto de hora cambiaba de opinión.

En Granada, su padre estaba enfermo del corazón y temía morir. Por fin Lorca prometió reunirse con nosotros tan pronto como hubiera ido a ver a su padre para tranquilizarse. Estalló la guerra civil. El murió fusilado y el padre vive aún.
¿Guillermo Tell? Yo estaba convencido que si no nos llevábamos a Lorca con nosotros en ese mismo instante, con su personalidad llena de ansiedades e indecisiones psicopatológicas, no obstante sus deseos, jamás hubiera sido capaz de reunirse con nosotros en la Villa Chimbrone. Fue en ese momento que se formó en mí un sentimiento de culpabilidad hacía él. Yo no había insistido lo suficiente para arrastrarlo con nosotros. Si yo hubiera querido, podría haberlo llevado a Italia.
Yo, en aquel entonces, escribía un gran poema lírico, "Me como a Gala", y en el fondo, más o menos celoso de Lorca. Quería estar solo en toda Italia, en la lejanía de mi horizonte frente a terrazas de cipreses y de naranjos. Verticales y solitarios, los solemnes templos de Pestum me habían de brindar una vez más la oportunidad de no amarlos para mayor felicidad megalomaníaca y de soledad. Si, en este momento del descubrimiento Daliniano de Italia, mis relaciones con Lorca fueron de cierto modo y por extraña coincidencia, el pricipio de una correspondencia casi violenta semejante a la de Nietzsche y de Wagner en el momento de la ruptura.
Fue la época en que yo hacía la apología del Angelus, de Millet; cuando escribía mi mejor libro, inédito aún, El mito trágico del Angelus de MIllet, y mi mejor ballet también, que tampoco se ha producido y que se llama El Angelus de MIllet, para el cual quería la música de Bizet (La Artesiana) y la música inédita de Federic Nitx (influenciado por Bizet). Nitx escribió esa partitura al borde de su locura en sus crisis antiwagnerianas. El Conde Etienne de Beaumont la había descubierto, según me parece, en una biblioteca de Basilea, y sin conocerla yo, me imaginaba que era la única música que podía convenirle a mi obra.
Los rojos, los semi-rojos y los rosados, y aún los lila-pálidos, aprovecharon propagandística, demagógica y vergonzosamente la muerte de Lorca en un chantage indigno. Trataron y hasta la fecha siguen tratando de darle a su muerte el significado de un héroe político.

Yo que soy su mejor amigo, declaro ante Dios y la historia que Lorca, poeta cien por ciento, era consustancialmente el ser más APOLITICO que jamás he conocido. Fue sencillamente una víctima propiciatoria de problemas personales, personalísimos, ultralocales y, ante todo, presa inocente de la confusión omnipotente, convulsiva y cósmica de la guerra civil española.
Una cosa es cierta. Cada vez que en el fondo de mi soledad logro hacer brillar una idea genial, sacándola desde lo más recóndito de mi cerebro a la superficie del aire de Cadaqués, o cuando logro dar una pincelada milagrosa, siempre escucho la voz ronca y dulcemente afónica de Lorca que me grita: ¡¡Olé!!

No sería justo cerrar este post sin hacer una mención al último superviviente de aquella prodigiosa generación, la llamada "Generación del 27" sin hacer un recordatorio a una persona que significaba el nexo de unión entre Lorca y Dalí, Pepín Bello, quien representó la memoria viva de una época hasta el 11 de Enero de 2008, fecha en la que feneció, de él Enrique Vila Matas dijo "el arquetipo genial del artista hispano sin obras" y con su desaparición se cierra toda una época de dolor, desarraigo, miedo, una época en que la cultura española se fraguaría en el exilio.
Parece como si los famosos versos de Antonio Machado siguieran resonando en nuestros oídos.

29 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado Pe-jota, interesante entrada. Antes de irme a dormir, esta noche tendo insomnio, se me ocurren varios comentarios. Sobre "La casa de Bernarda.." es cierto lo que dices, rivalidades con los primos que se vieron retratados en la obra y que odiaban a Federico. Al final su muerte, desgraciadamente, se explica por un provincianismo fascista. Siempre recuerdo, con espanto, el asesinato de Puerto Urraco, propio de la España más profunda.
Respecto a la relación: Lorca-Dalí-Buñuel, creo que solo ellos realmente saben lo que pasó. Es cierto que Federico y Salvador tuvieron una buena "amistad", pero la irrupción del guapete de Buñuel aguó la fiesta. Ya sabes que igualmente se dice que el título de "Un perro andaluz" era una alusión a Federico, por muy lenguaje surrealista que emplearan, era una ofensa. Ya otro día dejaré otro comentario. Esta vez también he sido el primero en comentar. Un abrazo. El otro amante.
Pd: no sé qué narices le pasa a esto que no me reconoce la cuenta.

Homo-Sapiensis dijo...

Apasionante, Pe-jota... vaya homenaje... Todo artista tiene sus claros oscuros; y tal vez,dadas las circunstancias, en su caso los suyos catalizaron su destino... Admiro mucho tu buen hacer Pe-jota. Un abrazo

vanto y vanchi dijo...

El próximo libro que lea será de Lorca....alguna recomendación?

Squirrel dijo...

Pe-Jota, estoy impresionadísimo con tu blog. De hecho he decidido dedicar todo mi horario laboral de hoy a leer para atrás. No sé, no se me ocurre nada más que decir de momento de lo atónito que me estoy quedando. Si no te molesta, te pondré un enlace (si es que me acuerdo de cómo se hace, que ayer lo intenté y no supe, soy lo peor) en el mío. Enhorabuena y un abrazo.

Squirrel dijo...

Olvidé añadir una cosa: el de la foto de San Sebastián que firma Kishin Shinoyama es Yukio Mishima, ¿verdad?

Anónimo dijo...

Me temo ke detrás de tanta palabrería hueca y tanta chorrada de psicoanalista de salón, Dalí esconde muchas vergüenzas y miserias de su relación con Lorca.
¿ Se nota ke me cae muy mal Dalí?

Dejame que te cuente dijo...

sea cual fuere el motivo de su muerte...
fue injusta..
mataron un artista...
me siento orgullosa de que mi tierra sea tan cercana ala suya....y lo admiro profundamente...
precioso post pe-

@ELBLOGDERIPLEY dijo...

Bueno, encantado de comentarte de nuevo, como siempre, y más ante ésta reconstrucción de la vida y muerte del gran poeta, tan trabajosa, extensa y brillante.
Entre muchas probables conjeturas,muchas cosas que se han contado, otras que no...es difícil saber y decir..
Yo lo único que digo, es que ojalá que no hubiera muerto ni le hubieran matado, porque podría haber escrito muchísimas obra excepcionales aún ¿Qué sentido tiene matar a un artista, a un escritor?
Luego nadie tenía la culpa, todos escurrieron el bulto...pero la culpa es en gran parte de toda la sociedad de la época (la misma que luego tendría todos sus libros muy elegantemente encuadernados). Es algo que, sencillamente no debía haber ocurrido jamás...El debió pasarlo horriblemente...no le dió tiempo, o parece que no quiso, pero se tenía que haber marchado a México o Nueva York.
A mí es un tema que me pone especialmente triste, y bueno, ante esos bestias...el consuelo es que su obra está más viva que nunca, en cada sitio dónde se representa y recita, y que forma parte de todos.
Petons.

El Deme dijo...

Según tengo entendido Ruiz Alonso fue el padre de las actrices Emma Penella, Terele Pávez y Elisa Montés...estas mujeres, qué opinaban del tema?

Anónimo dijo...

Estupendo post y rendido homenaje al autor. Me ha gustado leer el texto de Dalí y el vídeo m eha recordado que tengo esa peli pendiente de visión. Un abrazo

Caronte dijo...

Qué interesante lo que dice sobre "el ser español", y qué apropiado para estos tiempos, en los que parece que siguen los mismos rancios (al menos sus herederos) que se lo cargaron.

Me fascina él y su relación con Dalí, que se fue sin decir muchas cosas...

Muy buena entrada.

1 abrazo.

Caronte dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

Muy buen post, veo que eres un amante de la poesía además de otras expresiones del arte, ¿has pasado por aquí?:

http://planogeneralpisopiloto.blogspot.com/

Es una casa de poemas.

Genial tu blog

el Shysh dijo...

Hay sombras que nunca dejarán que les de la luz.

(Permíteme una deformación profe-sional: no querrás decir Generación del 27?)Un abrazo

Capri c'est fini dijo...

Bueno, qué decir de Lorca... sólo que es el genio total de la literatura española del siglo XX. Y lo que también lo alzó al Olimpo de los mitos es su desgraciada muerte prematura, que te hace pensar que es lo que pudo ser con un Lorca más maduro. Fue objeto de la brutalidad ignorante que desgracidamente da nuestro país. Bonito homenaje. Un abrazo.

Justo dijo...

Me ha impresionado mucho el texto de Dalí, que nunca ha sido santo de mi devoción, pero me parece muy interesante todo lo que dice,más que interesante, es complejo y profundo, y evita la tentación de caricaturizar a Lorca y a su muerte, de convertirlo en un títere político, su asesinato dramático y execrable no es excusa para utilizarlo como un muñeco en manos de personas o bandos que seguramente lo hubieran repudiado por igual por su condición sexual, en una época en que aquello era ampliamente rechazado.

Y la frase de Lorca sobre su manera de ser español.. ¡qué bella y oportuna en un momento en que a ese nivel estamos aquí tan paletos, por parte de los que dicen ser nacionalistas españoles o "periféricos"!

Sí, hay algo de urraquismo en todo lo que pasó, y también en lo que vivieron otros autores de la talla -en ningún caso menor que Lorca- de Cernuda o Aleixandre, fuera y dentro de España,exilio exterior e interior.

Había muchas Españas y no sólo dos -o por lo menos esas dos tenían diferentes meandros e intersecciones-, aunque de ese mito de las dos irreconciliables vivieran otros poetas -menores en comparación, lo siento, pero el tiempo pondrá a cada uno en su sitio- como Rafael Alberti.
Y otros a los que les tocó figurar en la España oficial y negra destacaron sin embargo por su humanidad y sensibilidad o fueron poetas extraordinarios que no han sido reconocidos justamente por eso: estoy pensando en Luis Rosales, gran amigo de Lorca como bien señalas.

Y las tres hermanas que cita Deme.. yo creo que lo han llevado toda su vida con vergüenza, de hecho fíjate que ninguna, ni Emma ni Elisa ni Terele lleva el apellido del padre.. y son tres grandísimas actrices.

Tu esfuerzo de presentar un post tan completo y sugerente tiene su recompensa, porque nos hace pensar y nos ilustra, y nos mantiene la mente inquieta. Mi enhorabuena y mi gratitud por la línea que sigues.

Champy dijo...

No me entiendo... no se porque me asombro si estoy en tu blog.

Esta vez, no estoy seguro, pero creo que has desarrollado el mejor post, al menos de los que te he leído.

Federico me produce tanta pasión como admiración, y el respeto que le profeso es equiparable al del creador, creas en lo que creas ó en quien creas, si conoces la vida y la obra de Federico solo te queda hincarte y santiguarte en su nombre.

Gracias.

2046 Besotes.

d2 dijo...

Gracias.

senses and nonsenses dijo...

sólo pasaba para saludarte y disculparme, ...que vivo sin vivir en mí, pero me he enganchado al post que es magnífico, de verdad, pero me ha encantado lionel wendt y por aquí sigo. muchas gracias por la referencia a los 30 años de punk. me era algo familiar el tema.
voy a darme una vuelta por los blogs colegas que os tengo a tod@s abandonad@s.

un abrazo.

Vulcano Lover dijo...

no sé si viste en su día esa película de Miguel Hermoso que pasó bastante desapercibida, pero que a mí siempre me gustó mucho. Si no la conoces te la recomiendo cálidamente.

Y gracias por este post que tanto me ha emocionado...

Dejame que te cuente dijo...

pe...imagino que sabes que hoy es el Día de la descarga de Firefox 3..
la version definitiva..
llevo todo el dia intentando descargarlo....pero esta la pagina colapsada.....
lo tienes ya?

Mery dijo...

Vaya pedazo de entrada la tuya, Pe-Jota, he de decirte que tengo que releerla de nuevo porque estoy segura de no haberlo asimilado en su totalidad.

Me he acordado de que Luis Rosales arrastró toda su vida una grandísima pena porque Lorca hubiera sido detenido en su casa y él no pudiera salvarlo.

Mi admiración a tu buen criterio y buen escribir.

Anónimo dijo...

Magnífico post, pero como me pongas más tan largos creo que me va a dar algo.
Como te gusta hacernos trabajar eh??

Pilar M Clares dijo...

¿Has visto la edición de cartas a su madre publicada este invierno? (Víctor Fernández, RBA)
García Lorca siempre.

Sibyla dijo...

Fue una injusticia brutal, irreparable...

Paseo muchas veces, por la zona de Viznar, donde se supone, está enterrado Federico.
Conozco su casa de Valderrubio, y he estado en su habitación de la Huerta de San Vicente, donde decía: "Dejar el balcón abierto"

Cada año asisto a un homenaje que se le da en Viznar, se leen poemas y hay música clásica en vivo.

Unknown dijo...

Soy nedio tocayo (o, mejor, 3/4: soy federico garcía, vamos) del poeta sevillano. Siempre, desde joven, he estado sacudido por su presencia y cobijado por su fronda, solar, de vendimia, en sus palabras. Impresionado, y conmovido por su muerte. entonces, en este momento, en que he propuesto la lectura de un texto que no está en el mainstream de su memoria, voy encontrando que siempre hay cosas que decir, que encontra, que revelar. El oscuro, y luminoso, episodio de Dalí, uno de ellos. Gracias, entonces, por la compañía, el rastro iluminado, la complicidad, en cierto modo.

Pilar dijo...

Tengo que decirte que La casa de Bernarda Alba se publicó después del asesinato. Sí es verdad que desde las primeras páginas andaba en distintas versiones por las casas de los amigos, de hecho incluso se publicó en la prensa que estaba escribiendo la obra. No obstante esto no invalida lo qeu dices, yo creo que als causas no eran económicas exactamente, sino que tenían más que ver con la bicha, con el mal duende, con la envidia, el cainismo. Y con la guardia civil, y la mierda de Queipo de Llano, asco me da, y los falsos amigos, la traición y la prepotencia de los falangistas fachas mierda. Y perdona el arrebato, me remueve este tema cuando veo o leo sus libros, el testimonio de sus conferencias, sus teorías de la vida y la creación, cuando sigue vivo con cada palabra de lo quee scribió. Pues esta noche en Cuarto mIlenio, he leído, Iker le dedica un programa, a sus fantasmas, o algo así se llama. Lo veré, auqnue sea solo por ver los documentos, y recordar sus textos.
Abrazote, ¿me dará miedo? Ya te cuento

David dijo...

Me gusta conocer sobre los escritores y disfruto de ver sus trabajos. En mi Alquiler Temporario Argentina paso mucho tiempo leyendo las obras de grandes autores de nuestra tierra y es un placer poder ver una y otra vez sus trabajos

Unknown dijo...

Un saludo agradecido a todos.