jueves, agosto 27, 2020

Tiempo de Inocencia: Marià Fortuny, Joaquín Sorolla, Ignacio Pinazo

 
Ignacio Pinazo Camarlench
Baco niño, 1870
Museo Bellas Artes, Oviedo
 
Ignacio Pinazo Camarlench
El guardavía, 1870
Museu Belles Arts Valencia
 
Marià Fortuny i Marsal 
Niño desnudo en la playa de Portici, c. 1874
Col Carmen Thyssen, Málaga
 
Marià Fortuny i Marsal
Los hijos del artista en el Salón Japonés, 1874
Museo del Prado, Madrid
 
Marià Fortuny i Marsal
Desnudo en la playa de Portici, 1874
Museo del Prado
 
Ignacio Pinazo Camarlench
Juegos Icarios, 1877
Museu Belles Arts Valencia
 
Ignacio Pinazo Camarlench
Fauno, 1888
Museo del Prado, Madrid
 
Joaquín Sorolla
Pillos en la Playa, 1899
Museo Bellas Artes, Oviedo
 
Joaquín Sorolla
El niño de la barquita, 1904
Museo Sorolla, Madrid
 
Joaquín Sorolla
Triste herencia !, 1899
Col Bancaja
 
Joaquín Sorolla
Nadadores, Jávea, 1905
Museo Sorolla, Madrid
 
Joaquín Sorolla
Al agua. Playa de Valencia, 1908 
Col Bancaja
 
Joaquín Sorolla
Niños en el Mar, Playa de Valencia, 1908
Col. Privada
 
Joaquín Sorolla
Chicos en la playa, 1909
Museo del Prado
 
Joaquín Sorolla
El baño del caballo, 1909
Museo Sorolla, Madrid
 
Joaquin Sorolla
El Balandrito, 1909
Museo Sorolla, Madrid
 
 

martes, agosto 18, 2020

Philippe d'Orléans dit Monsieur


Louis XIV et la famille royale 1670
Jean Nocret
Château de Versailles et de Trianon

Si hemos de creer a Saint-Simon, Luis XIV sintió una auténtica aversión hacia los sodomitas "une singulière horreur pour tous les habitants de Sodome". A juzgar por las costumbres de su corte su influencia solar parece haber tenido, respecto a este asunto, un eclipse. Las inclinaciones de su propio hermano, Philippe d'Orléans - Monsieur, están perfectamente documentadas. Más allá de eso, muchos príncipes, generales o prelados de la corte no mostraron ninguna mesura ni discreción. Hemos de recordar que las palabras "homosexual" y "homosexualidad" no surgirán hasta dos siglos después, esto es importante, ya que el problema no era la íntima amistad entre hombres, el problema era la sodomía, la cual comporta la pena de morir en la hoguera. Ahora bien, desde el Renacimiento y bajo la influencia ejercida desde Italia, las costumbres se habían relajado, lo cual había llevado a ciertos niveles de tolerancia.

Philippe-Julien Mancini-Mazarini, duc de Nevers et de Donzy (capitaine, lieutenant des mousquetaires)
Anónimo
Château de Versailles et de Trianon

Esta influencia italiana aún se mantenía durante el reinado de Luis XIV, un reinado dominado por Mazarino, quien oportunamente emparentó a sus sobrinos y sobrinas con los Grandes de Francia. Primi Visconti señaló en sus Memorias sobre la corte de Luis XIV:

"Il m'a été assuré [...] que le duc de Nevers [neveu de Mazarin] avait été le premier à corrompre Monsieur, lequel était un prince d'une grande beauté. Aussi la reine-mère avait-elle éloigné Monsieur du duc de Nevers, que l'on accusait d'avoir importé en France la mode du vice italien.".

De aquí nació la expresión "vicio italiano", ampliando una geografía que hasta ese momento había estado centrada en el "amor griego".

Presunto retrato de Henri Coiffier de Ruzé d'Effiat,
marquis de Cinq-Mars (1620-1642), 1625
Círculo de los Hermanos Le Nain

Las relaciones sodomíticas, por utilizar el lenguaje de la época, estamos en el siglo XVII, no eran nada excepcional ni extraño. El mismo Luis XIII se enamoraba, eso sí, castamente de efebos. Como sería el caso de Henri Coiffier de Ruzé d'Effiat, marquis de Cinq-Mars, forjando una relación ambigua con este favorito, por cierto esta historia acabaría bastante mal, el marques acabaría literalmente perdiendo la cabeza. Su séquito no tenía la misma brida real y los príncipes de sangre más poderosos estarían, en la actualidad, calificados como bisexuales. Su propio hermano Gaston d'Orléans, su medio hermano César de Vendôme y su primo Henri de Bourbon digamos que iban a vela y a motor, en palabras de Saint-Simon "au poil et à la plume".

Gaston de France (Gaston d'Orléans) 1634
Anthony van Dyck
Musée Condé, Chantilly

César de Bourbon-Vendôme, 1663
Balthasar Moncornet 
Château de Blérancourt 

Henri de Boubon II, Prince de Condé
Michel Lasne 
Château de Versailles et de Trianon

Bajo el reinado de  Luis XIV el amor entre hombres logrará una gran visibilidad. El marqués de Sourches, en 1682, evocando Versalles escribió:

"tous ces jeunes gens avaient poussé leurs débauches dans des excès horribles, et la cour était devenue une petite Sodome".

Madame, la princesa Palatina por su parte llegó a escribir: "Celui qui voudrait détester tous ceux qui aiment les garçons ne pourrait pas aimer ici [...] six personnes."

Ella también señala: "Sur ce chapitre, je suis devenue tellement savante ici en France, que je pourrais écrire des livres là-dessus.". Si se enorgullece de saber un par de cosas al respecto, es porque se casó con Monsieur, el homosexual más famoso de su tiempo. Según la leyenda negra de Mazarino, el príncipe fue educado deliberadamente como una niña. Una forma de desacreditarlo y neutralizar los complots contra su hermano Louis XIV. Pero esta versión ha sido descartada por los historiadores contemporáneos.

Philippe de France, duc d'Orléans, frère de Louis XIV dit Monsieur
Taller de Piere Mignard
Château de Versailles et de Trianon

Durante mucho tiempo, Monsieur, el primer príncipe del reino, fue una personalidad digamos que colorista. Hablador y extrovertido, amante de la danza y experto en etiqueta, le gustaba disfrazarse en privado y alguna vez en público. Rara vez practicaba la caza y la equitación. Y parecía indiferente al ejercicio del poder. Sobre todo le gustaba estar rodeado de sus Mignons. Es verdad, Monsieur cuida en extremo su apariencia, usa joyas y colecciona antigüedades, pero no está para nada loco. Era un luchador notable, que se cubre de gloria en los campos de batalla y su valentía es reconocida por sus soldados. El príncipe afeminado carga a la cabeza de sus tropas, espada en mano, bajo la metralla. Las numerosas victorias obtenidas por Philippe acabaron irritando al rey, celoso de la gloria militar de su hermano. Después del triunfo de Monsieur sobre el Príncipe de Orange en la Batalla de Cassel (11 de Abril de 1677), donde no sólo demostró grandes dotes como estratega y militar, sino que también su oposición a normas muy extendidas en aquella época, ya que prohibió el saqueo e inmediatamente mandó enviar médicos y alimentos a los heridos de ambos ejércitos. Luis XIV se niega a darle el mando del ejército, le cierra el paso a toda actividad política y militar pero le cubrió de oro.

Armand de Gramont, comte de Guiche (1637 - 1673), 1670
Jacob-Ferdinand Voet
Museo del Hermitage


Philippe de Lorraine, Chevalier de Lorraine (1643-1702)
Anónimo Francés
Château de Versailles et de Trianon 


Su homosexualidad y su amor por el travestismo no fueron algo excepcional en la corte francesa, según la historiadora Elisabetta Lurgo. Hubo muchos caballeros que cultivaron ambas formas de amor. Esta homosexualidad funcionaba como una cortina de humo que desarrollaron para ocultar las verdaderas razones de la incomprensión de sus coetáneos. Lo más sorprendente es que Monsieur mantuviera una relación, excepcional y única, con un único favorito, el Chevalier de Lorraine, un hombre que en palabras de Saint-Simon estaba "acostumbrado a dominar a Monsieur".

Philippe of Lorraine, Chevalier de Lorraine (1643 –1702)
Baldassare Franceschini
Fine Arts Museums of San Francisco

 
El 30 de enero de 1670, el Palacio de Versalles estaba en ruinas. Se rumorea que Madame (Henrriette d'Angleterre, con quien Monsieru se había casado en 1661) consiguió que Louis XIV mandara al exilio al Chevalier de Lorraine, el amante de su marido. Hasta entonces, el rey había tolerado las aventuras amorosas de su hermano, pero el Chevalier de Lorraine se había sobrepasado al mostrar públicamente sus celos de Henriette, aunque motivos no le faltaban y tampoco estaba al tanto de los planes políticos de la alianza con Inglaterra que trataba de conseguir su hermano, para los cuales necesitaba a Madame. Luis XIV dió satisfacción a las pretensiones de la esposa de Philippe al exiliar al demasiado atractivo caballero.


Henriette d'Angleterre
Anónimo Francés
Château de Versailles et de Trianon


Unos meses después, tras su regreso de Inglaterra, Henriette muere repentinamente y comienzan los chismorreos públicos que acusan al marqués de Effiat, nuevo amante de Monsieur, de haberla envenenado con una poción enviada por el Chevalier de Lorraine. Lo más probable es que Madame muriera de una enfermedad abdominal hereditaria entre los Estuardo.

Tras estos hechos Monsieur rogará a su hermano el regreso de Philippe de Lorraine, cosa que conseguirá. Quedando la escena registrada por Madame de Sévigné:

"Eh bien, dit le roi, il reviendra, je vous le redonne et je veux que vous m’ayez toute votre vie cette obligation, et que vous l’aimiez pour l’amour de moi… Je fais plus : je le nomme maréchal de camp dans mon armée."
 


Élisabeth Charlotte du Palatinat, 1670-71
Anónimo
Reiss-Engelhorn-Museen

El rey lo levantó y le dijo: "Hermano mío, así no deben besarse los hermanos". Y le besó fraternalmente. Unos meses más tarde, Philippe d'Orleans contraerá segundas nupcias, esta vez con Élisabeth-Charlotte du Palatinat, conocida como Liselotte o Pricesse Palatine, cuyas cartas y memorias son una impagable fuente de información sobre la homosexualidad de su marido. Por razones de estado cumplió con sus deberes matrimoniales, del mismo modo que lo había hecho con Henriette de Inglaterra. Pero para tener éxito utilizó una táctica de lo más curiosa, la cual nos queda relatada en las memorias de la Princesa Palatina:

"Feu Monsieur m’a fait rire une fois de bon coeur. Il apportait toujours au lit un chapelet d’où pendait une quantité de médailles, et qui lui servait à faire ses prières avant de s’endormir. Quand cela était fini, j’entendis un grand cliquetis de médailles, comme s’il les promenait sous la couverture. Je dis : »Dieu me le pardonne, mais je soupçonne que vous faites promener vos reliques et vos images de la Vierge dans un pays qui lui est inconnu.« Monsieur répondit : »Taisez-vous, dormez. Vous ne savez ce que vous dites.« Une nuit je me levai en douceur et je dirigeai la lueur du bougeoir dans le lit comme il promenait ses médailles sous la couverture. Je le saisis par le bras et lui dis en riant : »Pour le coup, vous ne sauriez plus me le nier« . Monsieur rit aussi et dit : »Vous qui avez été huguenote, vous ne savez pas le pouvoir des reliques et des images de la Sainte Vierge. Elles garantissent de tout mal les parties qu’on en frotte« . Je répondis : »Je vous demande pardon, Monsieur, mais vous ne me persuaderez point que c’est honorer la Vierge que de promener son image sur les parties destinées à ôter la virginité« . Monsieur ne put s’empêcher de rire et dit : »Je vous prie, ne le dîtes à personne"


Antoine II Coëffier de Ruzé, Marquis d'Effiat (1639 - 1719), 1688
Premier Ecuyer de Monsieur

Pero de esta manera conseguirán tener tres hijo, uno de ellos Philippe, que se convertirá en el regente de Francia hasta la mayoría de edad de Louis XV. una vez cumplidos sus deberes Philippe d'Orleans se dedicará plenamente a lo que realmente le gusta, disfrutar de sus mignons, llegando a convertir a Antoine II Coëffier de Ruzé, Marquis d'Effiat, no sin la oposición de Madame, en tutor de su propio hijo y a desarrollar y embellecer el Palais Royal de Paris y el Château de Saint-Cloud.

Le Palais Royal c. 1660
Adam Pérelle 
Musée Carnavalet

Vue du château de Saint-Cloud au XVII° siècle
Famille des Pérelle
Château de Versailles et de Trianon

Uno de los grandes méritos de Monsieur fue su mecenazgo de las artes: Tiziano, Veronés, Van Dyck, cerámica oriental, joyas, esculturas, obras de los grandes maestros holandeses. Pero esto no era todo, su afán filantrópico le llevó a preocuparse por el bienestar de los habitantes de Saint-Cloud, para quienes llegó a construir un hospital. En 1658 se interesó por un grupo de actores recién llegados de provincias, al frente de los cuales estaba un tal Molière, a quienes abrió las puertas de Versalles, Monsieur sólo tenía 18 años. 

Jean de Bonsi, 1616
Domenichino
Musée Fabre


Además de Monsieur y su séquito de "damoiseaux", el gusto italiano tenía predicamento entre el alto clero. Los cardenales o arzobispos, el abad de Auvernia o Jean de Bonzi, muchos prelados de las casas aristocráticas más prestigiosas, no reprimieron sus inclinaciones de ninguna manera. También en la vida militar se abrió camino un espacio de libertad donde los generales podían disfrutar de aventuras extramatrimoniales. El Gran Condé, el Duque de Vendôme, el Mariscal de Villars, el Mariscal de Luxemburgo (involucrado junto a Madame de Montespan y otros 442 sospechosos en el asunto de los venenos), el Mariscal de Turenne y el Príncipe Eugène, cuya presencia al frente de los ejércitos cambió el curso de la historia, frecuentaron la intimidad masculina.


Louis II de Bourbon-Condé, duc d’Enghien-Grand Condé, 1654-58 
Justus van Egmont 
Château de Versailles et de Trianon

Louis-Joseph de Bourbon, duc de Vendôme, dit le Grand Vendôme  (1654-1712)
Etienne-Jehandier Desrochers 
Château de Versailles et de Trianon


Claude-Louis-Hector de Villars, 1704
Hyacinthe Rigaud
Col.Vaux-le-Vicomte 


François-Henri de Montmorency-Bouteville, duc de Piney-Luxembourg
Anónimo
Château de Versailles et de Trianon


Henri de La Tour d'Auvergne-Bouillon, Vicomte de Turenne c.1665
Maréchal de France
Charles le Brun
Château de Versailles et de Trianon 

François-Eugène, prince de Savoie-Carignan, dit Le Prince Eugène
Valck Gerrit (1651-1726) Mérian Matthäus, le Jeune (1621-1687)
Château de Versailles et de Trianon


Todo esto era público, como queda demostrado por la abundancia de testimonios, lo cual se debe al hecho de que la corte estaba toda ella reunida en Versalles donde todos vivían permanentemente bajo la mirada de todos. En cuanto al mariscal de Huxelles, Saint-Simon evoca su "débauches grecques dont il ne prenait pas la peine de se cacher". El memorialista precisa también que "le goût de Monsieur n'était pas celui des femmes et il ne s'en cachait même pas". Pero, ¿cómo lo experimentó Luis XIV, un rey muy cristiano, en el fondo de su corazón?


Sinceramente, no era una situación del agrado de Louis XIV. En un panfleto de 1685, La France devenue italienne, se dice sobre corte de Francia:


"La débauche y régnait plus qu'en un lieu du monde, et quoique le Roi eût témoigné une horreur inconcevable pour ces sortes de plaisirs, il n'y avait qu'en cela qu'il ne pouvait être obéi."


Luis XIV tuvo que aceptar esta situación ya que no podía de ningún modo privar al ejército real de sus estrategas más brillantes, con el pretexto de que algunos lo confundían con el Batallón Sagrado de Tebas. Según Madame, fue el ministro Louvois quien consiguió contemporizar el tema, incluso encontrando un interés militar:


"lorsqu'il fallait aller à la guerre et entrer en campagne, on ne pouvait détacher [les militaires] de leurs maîtresses», alors qu'avec leurs goûts masculins, les militaires «étaient bien aises de quitter les dames, et d'entrer avec leurs amants en campagne et [...] n'étaient point aussi pressés de retourner chez eux."


Emmanuel Théodose de La Tour d'Auvergne, cardinal de Bouillon, 1669 - 71
Giovanni Battista Gaulli
Château de Versailles et de Trianon


El rey cerró los ojos y además logró mantener las mejores relaciones con el cardenal de Bouillon o el duque de Vendôme, entre muchos otros. Luis XIV nunca pensó en legislar contra los sodomitas, además no tomó medidas contra ellos como sí lo hizo contra los protestantes.


Louis de Bourbon, comte de Vermandois c. 1680
Pierre Mignard


François Louis de Bourbon, Prince de la Roche-sur-Yon, Prince de Conti
Anónima desconocido de la Escuela Francesa
Château de Versailles et de Trianon

Sólo una vez que el rey reaccionó con fuerza. Fue al enterarse de la creación, en 1682, de una sociedad secreta, la hermandad italiana, fundada por Monsieur y el Chevalier de Lorraine, la cual reúne a lo más granado de homosexualidad entre los más grandes señores, entre ellos François Louis de Boubon, entonces Prince de la Roche-sur-Yon y Louis de Boubon, Legitimé de France, Comte de Vermandois. Esto provocará un gran escándalo en la corte. Su propio hijo, el conde de Vermandois, nacido de la relación adúltera que mantuvo con Madame de la Vallière, era uno de los miembros. Louis XIV se enfurece y envía a los príncipes a sus tierras. En cuanto a su hijo, lo regañó y lo expulsó de Versalles. Nunca más lo volvería a ver ya que el joven conde murió de enfermedad en pleno combate donde estaba tratando de recuperar la estima de su padre.

Louis de Bourbon, Légitimé de France, Comte de Vermandois (1680)
François de Troy
Origen: Château de Valencay, Antigua Colección del Duque de Talleyrand-Perigord

Durante la segunda parte de su vida, Luis XIV se convierte, bajo la influencia de Madame Maintenon, en un devoto católico. El anciano enfermo influenciado por Madame de Maintenon ya no era el joven rey que bailaba en los ballets de Lully, que apoyaba a Molière contra los devotos y al que su propio estilo de vida apenas le permitía dar lecciones de moral. Ahora su mirada sobre Lully era diferente. Durante mucho tiempo, no se detuvo a pensar en su bisexualidad y su realación con Philippe Quinault. Pero, ahora, los simples rumores sobre su relación con un paje, llevaron al compositor más famoso de su reinado, a caer en relativa desgracia. Moriría poco después.


Jean-Baptiste Lully, surintendant de la musique du roi (1633-87)
Jean-Louis Roullet (1645-1699) 
Château de Versailles et de Trianon

Louis XIV distaba mucho de ser un modelo de virtudes, lo cual queda patente con los mucho hijos que tuvo fruto del adulterio. Una de sus obsesiones era legitimarlos. Para lo cual buscó emparentar a sus hijos con familias ilustres. El hijo de Philippe de Orleans fue una de las victimas de esta política, ya que consideró casarlo con la hija que tenía con la marquesa de Montespan, mademoiselle de Blois. Lo que Monsieur y sobre todo Madame rechazaron categóricamente, lo consideraron un acuerdo inaceptable. Para lograr sus fines, Louis XIV llegó a manipular a su hermano, utilizando su vida privada para llevar a cabo su chantage y conseguir la aprobación de su hermano y la consternación de Madame. Como siempre Saint-Simon nos da luz sobre el asunto:

Philippe de France, duc d'Orléans, frère de Louis XIV dit Monsieur

Élisabeth Charlotte du Palatinat, 1713
Hyacinthe Rigaud
Château de Versailles et de Trianon

"le Roi s'adressa à monsieur le Grand, qui était de tout temps dans sa familiarité, pour gagner le chevalier de Lorraine, son frère, qui de tous temps aussi gouvernait Monsieur». Le roi utilisa aussi le marquis d'Effiat, «avec tant de vices si opposés au goût et au caractère du Roi et de Madame de Maintenon, il en était bien voulu et traité avec distinction, parce qu'il avait eu part avec le chevalier de Lorraine à réduire au mariage de Monsieur son fils"

Por su rango, todos estos príncipes y aristócratas nunca se preocuparán, a pesar de las posiciones de la Iglesia, por inequívocas que sean. No es seguro que los otros estratos de la sociedad, anónimos sin nacimiento ni protecciones, puedan decir lo mismo. Lo que recuerda la moralidad de La Fontaine: "Selon que vous serez puissant ou misérable, les jugements de cour vous rendront blanc ou noir.". Una situación que sigue siendo relevante en todo el mundo.

Gravure de Scotin l'aîné (d'après Berain) représentant le "Mausolée pour la cérémonie funèbre de S.A.R. Philippes de France Duc d'Orléans, frère unique du Roy, érigé en l'Eglise de St Denis par ordre de Sa Majesté, le samedi 23. Juillet 1701
Archives Nationales, Paris

El 8 de Junio de 1701 tenemos el que se cree que es el único y gran enfrentamiento entre los dos hemanos, Louis XIV recrimina a Philippe el comportamiento extramatrimonial de su hijo, sus continuas infidelidades, a lo que Philippe responderá iracundo, recordándole a Louis XIV, quien se habia convertido en un moralista, su pasado y sus más que numerosas amantes y las continuas humillaciones a las que había sometido a la reina. Al mediodía del día siguiente se apagaría la vida de Monsieur, con el Versalles dejaría atras el gran foco que lo iluminaba, ya que Louis XIV era grande pero su hermano era el gran foco que iluminaba su figura. Sus magníficos funerales se celebraron en Saint-Denis, tal y como quedaba explicitado en su testamento. Su corazón fue llevado a la Val-de-Grace y sus restos fuero depositados en la cripta borbónica de Saint Denis.

+Información:

http://www.slate.fr/story/191781/cour-gay-friendly-louis-xiv-frere-monsieur-philippe-dorleans-amours-homosexuelles
http://www.louvrepourtous.fr/A-Versailles-le-frere-tres-gay-de,159.html
https://partylike1660.com/



domingo, agosto 09, 2020

Los Mignons de Henri III de Francia, el último Valois


Henri duc d'Anjou c.1570
Atribuido: Jean de Court / Formalmente atribuido a François Clouet
Bibliothèque nationale de France

Hermosos efebos con cintas, volantes y bien perfumados, esta es la imagen que nos viene a la cabeza cuando pensamos en los "Mignos" de Henri III de Francia, el último Valois. Grandes y delicadas personas extremadamente coquetas que a imagen del Rey, su maestro, se entregan al libertinaje y los placeres. Sin embargo, bajo su elegante exterior y su belleza, son verdaderos espadachines, a veces con fines políticos, de lealtad inquebrantable  al Rey. En cuanto a Henri III, podemos afirmar que es todo un enigma, un monarca con una personalidad tremendamente compleja, y por eso de un gran atractivo.
 
Henri es un hombre que presta gran atención a su atuendo. Elegante, refinado. Por supuesto, se cuelga preciosos pendientes de las orejas, se adorna con joyas, adorna sus vestidos, pero sencillamente asume la moda italiana, adoptada por muchos de sus contemporáneos, es algo fácil de comprobar, sólo necesitamos mirar unos cuantos retratos de la época.


Henry III de Francia
François Quesnel
Collection of Ambras Castle, Innsbruck

Ciertamente favorece a ciertos hombres, los llamados "Mignons". Pero el término, en ese momento simplemente significaba "favoritos" (otra cosa es el "mignon de couchette" que hace referencia a un amante). No era de extrañar que Enrique III se rodease de favoritos. Era costumbre entre los gobernantes distinguir a los hombres (casi siempre de modesta extracción), y elevarlos a  miembros de confianza y colmarlos de honores y riquezas. Desde Philippe III el Audaz, la mayoría de los soberanos tenían favoritos. Las únicas excepciones serán los Reyes Borbones Louis XIV, Louis XV y Louis XVI ... Cultiva sus conquistas con relativa discreción. De hecho, también siente mucho afecto por su esposa, la reina Louise de Lorraine: forman una pareja particularmente muy unida.

Louise de Lorraine-Vaudémont (1553-1601)
Anónimo c. 1580
Musée du Louvre

Henri fomentará las relaciones femeninas de sus Mignons, así como las búsqueda de esposas de alto rango (a diferencia de Luis XIII, que siempre será reacio a compartir el favor de sus favoritos con una mujer). Su gusto por el refinamiento y por el orden, llevarán a Henri III a ser el primer soberano en poner en práctica un verdadero ritual de la corte: la famosa "étiquette" que acabó perfeccionándose y alcanzando su máximo esplendor con Louis XIV. Henri III entendió que ella confería majestad a la persona real y legitimidad a su poder para seguir siendo, en su ausencia, dueño de su corte y evitar las rivalidades que vivían una época de gran apogeo. Según esta etiqueta, sus más cercanos servidores debían pertenecer a la nobleza más alta: por lo tanto, los colmará de favores.

Esto acabará siendo un nido de rencores y envidias, las cuales se convertirán en armas arrojadizas contra el monarca  y, matando dos pájaros de un tiro, la calumnia y la difamación se extiende no tan sólo a los favoritos sino al propio Rey. Las liberalidades del Rey para con sus favoritos serán usadas contra él tanto por lo Hugonotes como por las ligas ultra católicas.

Henri III, c. 1580-86
François Quesnel
Museo Narodowe de Poznan

Por otra parte Henri III es un soberano psicológicamente perturbado. El excesivo amor que Catherine de Medici ha demostrado por él desde su nacimiento es la causa principal de este trastorno. Este hijo, demasiado amado por su madre, no se siente amado. Su escandalosa predilección por él lo separó de los que lo rodeaban. Sus hermanos y hermanas lo envidian. Los otros le temen, lo adulan. Es un gobernante que anhela ser amado por sí mismo, y pone en ello una energía que roza la desesperación. Ciertamente, la reina Luisa de Lorena lo ama sinceramente, pero necesita una "simbiosis espiritual". Esto es lo que busca en sus favoritos, y es por eso que no puede prescindir de ellos: toda su vida estará a su lado, entre dos y seis Mignons, uno dando paso a otro de acuerdo con la política y los afectos del soberano.

« Aimez-moi, aimez-moi autant que je vous aime ! »

Por los hombres que aceptan devolverle este afecto incondicional trastornará la jerarquía de la nobleza, los llenará de favores, regalos y honores. Henri III nunca hizo las cosas a medias. En una nota fechada en mayo de 1579 le confiesa a Villeroy: "Aquello que amo es con extremo"

François d'Espinay Saint-Luc
Anónimo (1596-97)
Paris, Musée de l'Armée

Cuidado con aquellos que demuestran ser indignos de su afecto. François d´Espinay, señor de Saint-Luc, al que Henri III compró en 1579 el castillo de Rozoy-en-Brie, y al que convirtió en gobernador de Brouage y le ofreció el mando del regimiento Picardía ... de repente cayó en desgracia. Demasiado codicioso de favores, no lo suficientemente discreto sobre los secretos de estado ... la hostilidad del Rey hacia él lo mantuvo alejado de la Corte hasta la coronación de Enrique IV.

Louis de Béranger du Guast 
François Clouet 
La Nota inferior está mal
Bibliothèque nationale de France

Enrique III siempre llora con sinceridad la muerte de sus Mignons. Cuando Louis de Béranger du Guast, a quien favoreció mucho antes de tomar el trono, muere asesinado, está inconsolable. Cuando Louis de Maugiron y Jacques de Quélus murieron en abril de 1578 en un duelo con los hombres del duque de Guisa, la tristeza del rey se convirtió en puro misticismo. Conserva sus cabellos como si de una reliquia se tratase y expone sus cuerpos en una cama de desfile.

Louis de Maugiron c. 1577
Anónimo

Jacques de Levis, comte de Caylus / Quélus
François Quesnel

Entraigues et ses compagnons

Ont bien étrillé les mignons :

Chacun dit que c’est bien dommage

Qu’il n’y en est mort davantage.

Como podemos ver, esta relación apasionada con sus favoritos, no implica que sean sus amantes pero no es entendida por sus contemporáneos, y aún menos aceptada.

A menudo se olvida que Henri III nunca disfrutó de una salud robusta. Todo lo contrario: fiebres, migrañas insoportables, trastornos intestinales, erupciones cutáneas, edema, gota, infecciones graves de oído, una de las cuales le hace perder la audición en uno, y especialmente la sífilis y la tuberculosis. Pero hace todo lo posible para camuflar estas debilidades: es el Rey, no puede mostrarse enfermo ... El cuidado dado al maquillaje, el tiempo dedicado a elegir su atuendo son una forma de camuflar lo que le está carcomiendo desde dentro y causando estragos.

Retrato ecuestre de Henri III
Anónimo
Musée Condé

Si no se dedica a actividades físicas intensas y belicosas, no es por repugnancia (le gusta mucho montar, lo hace con gran elegancia, a veces caza y ocasionalmente se entrega al tenis. ) Un esfuerzo prolongado lo agota muy rápidamente. Se aleja de los ejercicios violentos como la caza y la guerra simplemente porque carece de los recursos físicos. Prefiere las actividades de la mente, porque es inteligente, por supuesto, pero también porque las tolera mejor. Cuando enumeramos las orgías generalmente denunciadas durante su reinado, nos damos cuenta de que son pocas. En realidad, el Rey es de una constitución demasiado débil para soportar el ritmo de vida que se supone que llevaba. Si su salud falla, la de sus favoritos no. Son el vigor que le falta. "Tienen salud y fuerza", y Henri disfruta del hecho de vivir a través de ellos.

Paul de Stuer de Caussade, seigneur de Saint-Mégrin
Anónimo
Musée du Louvre

Las intrigas judiciales son menos superficiales de lo que aparentan y la concesión de indultos es menos frívola de lo que la opinión pública podría imaginar. En un momento en que el poder monárquico tenía que contar con la suma de las diversas facciones nobles, usar esos medios era hacer política. Para proteger su autoridad y su corona, Henri no podía contar con su familia: su hermano, el duque de Alençon, fue el más rápido en construir complots contra él, apoyado por su hermana Marguerite (Margot), esposa de Henri de Navarra (el futuro Henri IV). Ningún acuerdo entre los hermanos fue posible, a pesar de los esfuerzos realizados por Catherine de Medici para reconciliar a sus hijos. Esto llevará a Henri III a rodearse de hombres de confianza,  de su misma generación y dedicados a su causa. ¡Las bellezas valen más que su leyenda!

Charles de Balzac d'Entragues, 1581
François Quesnel
Bibliothèque nationale de France

Fieles a su maestro, son sus guardias, sus asesores políticos e incluso sus verdugos. Louis de Béranger du Guast, François d’Espinay de Saint-Luc, Jacques de Caylus, René de Villequier, François d'O... son guerreros formidables, cuchillas delgadas indispensables para la seguridad real. Henri de Saint-Sulpice, nombrado barón en septiembre de 1575, fue nombrado capitán de los Cien Caballos Ligeros de la Guardia en enero de 1576. François d'O se convirtió rápidamente en el asesor financiero indispensable para Henri III. Después de una desgracia momentánea vinculada a sus celos hacia Epernon y Joyeuse, será uno de los pocos testigos de los últimos momentos de Henri III antes de servir a Henri IV. Jacques de Caylus es famoso por ser un guerrero formidable. Louis de Maugiron, un joven de gran valentía y gran coraje, pierde un ojo en combate. En cuanto a Saint-Luc, Brantôme lo describe como "muy valiente y buen capitán" y el futuro Henri IV, lo considera un soldado brillante. Pero los más devotos de la causa de Henri III, las bellezas más importantes de su reinado, fueron los duques de Epernon y Joyeuse.

Henri III c. 1581
Jean Decourt
Bibliothèque nationale de France

En la última mitad de su reinado, Henri III se rodeó de dos hombres cuyo ascenso sería prodigioso. Serán los Archimignons: Jean-Louis de Nogaret de La Valette, futuro duque de Epernon, y Anne de Batarnay d´Arques, que pronto será duque de Joyeuse. Ante los Borbones y los Guisa que, como cazadores en busca de su presa, esperaban con impaciencia el momento de apoderarse de la corona, los últimos Valois necesitaban devotos a su causa, en cuerpo y alma. Estos fueron los duques de Epernon y Joyeuse. La Casa de Lorena tiene importantes servidores, divididos entre sus diversos miembros: los más influyentes son los tres hermanos Guisa, el duque de Mercœur, los dos hermanos de Aumale y Nemours. Enrique III colmará de favores a los dos archimignones, tratando de quitar poder e influencia a sus enemigos y entregársela a estos hombres de los que está seguro.

Jean-Louis de Nogaret de la Valette, duc d'Epernon
Anónimo Francés s.XVI
Collection Colbert de Torcy
Château de Versailles

Jean-Louis de Nogaret de La Valette descendía de los señores de Gascuña, que lucharon en las guerras en Italia. Cabeza política, gran soldado, personalidad un tanto hosca y frágil pero leal, se dedicó en cuerpo y alma a Enrique III. Su carrera fue deslumbrante: coronel general de infantería en 1581, duque de Epernon en 1581, Chevalier du Saint-Esprit en 1583, gobernador de Metz el mismo año, gobernador de Boulogne-sur-Mer en 1585. coronel general de infantería y gobernador de Provenza en 1586.  Henri III le encomendó múltiples misiones diplomáticas, incluidas varias reuniones con el gran rival del Rey, el Borbón Henri de Navarra, que desafortunadamente no fueron coronadas con éxito.

 
Anne duc de Joyeuse
Peintre de Joyeuse, 1580
Bibliothèque nationale de France

Anne de Batarnay d´Arques, guerrero consumado, apuesto y de carácter amable. Defendió todas las opiniones de Henri III y demostró ser digno de su confianza. Gobernador del Mont Saint-Michel en 1579, primer vizconde de Joyeuse, se convirtió en duque en 1581, Gran Almirante de Francia en 1582, Caballero del Espíritu Santo en 1583, gobernador de Normandía el mismo año (cargo normalmente reservado para el Dauphin pero en ausencia de un heredero al trono ...) y gobernador de Le Havre en 1584. Enrique III lo emparentará con la familia real: le concede en matrimonio la media hermana de la reina Luisa: Marguerite de Vaudémont. Le escribió a principios de 1581 a la condesa de Bouchage:

Bal des noces d'Anne, duc de Joyeuse et Marguerite de Vaudémont, le 24 septembre 1581. 
Escuela Francesa (1581-1582)
Musée du Louvre, Paris

Ma cousine (…). Je ne veux vous céder l’honneur que j’ai procuré et résolu de faire à votre fils que je tiens pour mien, Arques qui est d’épouser ma belle-sœur, sœur de ma femme, Mademoiselle de Vaudémont. Si je l’eusse pu faire mon fils, je l’eusse fait, mais je le fais mon frère.

El Tratado de Nemours, firmado con La Liga el 7 de julio de 1585, marca el último período del reinado de Henri III y el declive del favor de Archimignon. Epernon quien fue deshonrado y Joyeuse fue asesinado en la Batalla de Coutras en 1587.

Si admissible et avisée qu’elle ait pu être, la politique faisant de La Valette et de Joyeuse les instruments privilégiés du roi contre les Grands manquait de deux soutiens essentiels : la présence d’un dauphin et le soutien de l’opinion publique, la popularité en un mot.