El 10 de abril de 1908, nacía en Málaga, en el seno de una familia andaluza muy humilde, Miguel Frías de Molina, curiosamente el mismo año que naciera el más importante autor de las letras de la copla, Rafael de León, de quien sería amigo y cómplice entrañable. Según cuenta él en su propia biografía "Botín de Guerra", difícil de conseguir en estos momentos, Miguel Frías, el cual pasaría a la posteridad como Miguel de Molina, abrió los ojos al mundo en una España donde habitaban la pobreza, los terratenientes, la superstición y la miseria que acabarían llevándonos a la nefasta guerra civil. El joven malagueño aprendió muy pronto la dureza de la vida ya que su padre era epiléptico y pasaba los días postrado en la cama, y las mujeres de la familia: su abuela, su madre y sus cuatro tías, que lo rodearon siempre, se afanaban con esfuerzo en sacar adelante la familia sin la contribución paterna dado su estado de salud. A los 13 años, Miguel toma la decisión de marcharse del hogar familiar. Su vida se convierte en ese momento en un puro avatar: en Algeciras consigue trabajo en un burdel regentado por una mujer conocida como "Pepa la Limpia". Esta y su amante, encariñados con el muchacho, invitan a Miguel a viajar a Granada para presenciar un espectáculo organizado por Manuel de Falla y Federico García Lorca, en el que el primer premio de flamenco se lo llevaría un jovencísimo y desconocido Manolo Caracol. Aquel viaje sería una revelación y cambiaría para siempre el futuro de Miguel, ya que decidiría lo que quería ser.
A la gran admiración por Lorca, a quien conocerá personalmente más adelante, entablando amistad con él, se une el descubrimiento del género musical de la copla, absoluto rey del momento y banda sonora sentimental de los españoles desde mediados de los años 20. Decidido abandona el burdel de Pepa, viaja a Tetuán y de allí a Granada y Sevilla donde organiza espectáculos para los turistas. El año de la proclamación de la república es cuando Miguel Frías se decide a dedicarse profesionalmente al mundo del espectáculo, convirtiéndose a partir de ese momento en Miguel de Molina y popularizando canciones como «El día que nací yo» y «Ojos verdes», a cuyo nacimiento asistió. Cuentan y se tienen datos de que en el café de Oriente de Barcelona, en una mesa con Federico García Lorca, Rafael de León y Miguel de Molina, se escribió la letra para el cantante malagueño, aún sin música, o al menos Miguel se la pidió a su autor y amigo. Miguel de Molina se enfadaría mucho al verla cantada por otras intérpretes como Blanquita Suárez, que tampoco fue la primera en interpretarla ya que se estrena en plena guerra en la voz de Rafael Nieto, y Estrellita Castro, en versión retocada por el autor Salvador Valverde, aunque, como si fuera una cosa de destino, la canción no sería un éxito hasta que la cantara Miguel en 1939, razón de la reconciliación de los amigos.
Al mismo tiempo Miguel obtiene un gran éxito bailando el "Amor Brujo" de Falla ya que es un artista de composturas muy finas, que rompe moldes utilizando chaquetillas muy ajustadas y floreadas, que nunca ocultó su homosexualidad, marcando su enorme personalidad y cantando muchas de las coplas en masculino, como "Ojos verdes" o "La falsa monea", que cuentan que salía a cantar con el torso desnudo, o sólo cubierto por unas monedas pegadas, lo que le da fama en la época republicana, y le causa persecuciones después. Miguel triunfa en Madrid, Barcelona y Valencia donde alcanza su madurez y consagración artística. El estallido de la guerra civil le coge rodando su primera película en Barcelona, que nunca sería estrenada como represalia, y se entrega a la labor de animar con sus espectáculos a las tropas republicanas, lo que le costaría con la dictadura muy caro.
En la España ya franquista Miguel de Molina recibe la visita de un empresario, miembro del Movimiento, quien le obliga a firmar un contrato para actuar por toda España. Si no acepta las condiciones, se le prohibirá trabajar y su pasado como artista en las tropas republicanas le pasará factura. Cuando lleva un año junto a otra compañera actuando para este empresario, aunque sabe que detrás hay alguien más importante, decide no renovar el contrato y así lo comunica a su interlocutor. Recibe esa noche una visita de tres individuos que le obligan a subir a un coche manifestándole que tienen orden de llevarle a la Jefatura Superior de Policía pero el vehículo seguirá hasta un descampado del Paseo de la Castellana donde Miguel de Molina es brutalmente torturado: le arrancan el pelo a jirones, le rompen varios dientes y le desfiguran completamente la cara mientras le gritan "esto por rojo y maricón", como aseguran que pasó en el caso de Federico García Lorca, antes de fusilarlo. Probablemente quienes le propinan la paliza lo dan por muerto, razón por la que salva, a pesar de las lesiones, la vida. Recibe una notificación para ser confinado en Cáceres y de ahí pasará a Buñol, donde se le prohíbe trabajar. Consigue de un amigo un pasaporte para viajar a Buenos Aires, y se exilia. En la capital argentina triunfa allá donde actúa y adquiere una casa. Sin embargo un día recibe una orden de que debe abandonar el país, por orden de la embajada española, y es extraditado sin más explicaciones. Cuando vuelve a España se ve obligado a malvivir y descubre que todas sus desgracias: la explotación en las actuaciones durante los primeros años del franquismo, la paliza, la prohibición de actuar, su expulsión de Buenos Aires, etc. se deben a un mismo personaje: un alto funcionario de Asuntos Exteriores del gobierno de Franco al que no conoce ni ha visto jamás.
En 1957 vuelve a España y recorre toda la geografía española actuando, aunque tiene que aguantar todas las crónicas que en su contra se escriben por su condición de homosexual y republicano, con toda clase de mofas y desprecios, por lo que regresa a Argentina, entristecido, para no volver a España, donde murió, y fue enterrado en el cementerio de la Chacarita con grandes honores, lejos de su Málaga natal, que hoy trata de recuperar sus restos en el centenario de su nacimiento. Lo que resulta indudable es que Miguel de Molina, un siglo después, es el gran mito, la enorme figura de la Copla española, por encima de las vicisitudes y las pruebas de la vida. Quizá como en la copla «Antonio Vargas Heredia», podría achacársele aquello de que era «El más arrogante y el mejor plantao, y por los contornos de Sierra Morena, no lo hubo más guapo, más bueno ni honrao».
"... A Miguel de Molina. La gracia... la graciosa, gracia halada desnuda, imperceptible, fugaz, y tan dable a pocos..."
Rafael Alberti
"... Miguel de Molina... bien pudiera decir como Schubert ¡Vuelan mis canciones!... Y vuelan, más que por su propia virtud, por las alas que ellas prende el arte estilizado de Miguel de Molina... La canción más vulgar, en letra y música, se ennoblecen del señorío artístico de Miguel de Molina; artista de esos pocos de raza elegida, en cuyo arte, lo interpretado es lo de menos, el intérprete es todo, artista que más pudieran llamarse, encantadores de públicos, tanto su arte es de personal prestigio y sugestión. Ese algo inexplicable, que como todo lo inexplicable es lo que nos acerca y nos descifra el misterio de un mundo invisible espiritual, que es tal vez la única comprensión de haber vivido en este..."
Jacinto Benavente
Andrés Segovia
En 1989, Jaime Chávarri llevará a la pantalla, de forma tangencial, el triunfo y la expulsión de Miguel Molina en la película "Las cosas del querer", interpretada en sus papeles principales Manuel Bandera, Ángela Molina, Ángel de Andrés López, Amparo Baró, Santiago Ramos, María Barranco.
"Las cosas del querer" letra de Rafael de León y música de Manuel López Qiroga
"La bien pagá" compuesta por Ramón Perelló (1903-1978)
Los motivos que llevaron a no encarar el tema de forma directa son desconocidos. En 1995 Chávarri volverá sobre el tema narrando el exilio argentino.
Y todo esto porque sencillamente era homosexual, republicano y un auténtico genio para un régimen que nos sumiría en la etapa más gris y devastadora de nuestra historia.
"Muchas veces olvidamos de donde venimos, lo que vivieron aquellos que habitaron la casa una o dos generaciones antes que nosotros, por eso conviene recordar el pasado para hacer un futuro mas justo".
+ información
http://fundacionmigueldemolina.org/Fundacion/index.htm
http://www.elpais.com/articulo/madrid/Genio/figura/trajes/hechuras/elpepiespmad/20090324elpmad_11/Tes
17 comentarios:
Estaba a punto de decirte algo sobre Ballard (no sabía qué) cuando veo que acabas de actualizar con un relato maravilloso, documentado, sentido y enamorado de esa figura valiente llamada Miguel de Molina. La película de Chávarri hizo que una nueva generación de españoles le conociera (muy libremente), también hay una entrevista deliciosa de Carlos Herrera que le hizo ya muy mayor en la Argentina de la que nunca volvió. Es otra historia española de exilios y huídas, otra vergüenza más (Lorca, Machado). Gracias Pe-Jota!!
Interesantíssim, bona currada nen.
Gracias por esta entrada. Hace años trabajé con un sobrino de Miguel de Molina. Me da pena que en esta mi tierra, se haya valorado tan poco a sus artistas en vida ( hablo también de Picasso, ahora vanagloriado comercial que no artísticamente por la derecha). Qué pena que las nuevas generaciones de homosexuales de dolce gabanna y calvin klein desconozcan historias como estas. Un grande y luchador donde los haya.
Se te ha olvidado aportar la información de la exposición que se ha montado en Madrid en torno a su figura (otra de esas que no verás...)Salvo alguna noticia en prensa y televisión no se ha anunciado mucho, de hecho ni siquiera tiene una web propia, y la de la sala donde se expone (de la comunidad de madrid apenas da información, pero de todas formas te pongo yo el enlace, vale?
http://www.madrid.org/cs/Satellite?c=CM_Actuaciones_FA&cid=1142523446534&idConsejeria=1109266187272&idListConsj=1109265444710&idOrganismo=1109266228350&language=es&pagename=ComunidadMadrid%2FEstructura&sm=1109266100977
Precisamente el sábado lo mencionaba en el RadioBlog, gracias por toda la información que aportas mucha de ella la desconocía, por ejemplo no sabía que volvió a España varias veces.
Uno de los más grandes, sin duda.
Lo adoro.
Besos
¿Cual es la segunda parte de la película de Chavarri?
¿Las cosas del querer 2?
Qué precioso homenaje, de verdad..
Yo tampoco supe de él hasta Las cosas del querer, una película estupenda -la segunda parte más floja, pero no recuerdo el nombre-; a partir de ahí indagué un poco, creo que le oí en la radio, desde Argentina, añorando Málaga pero contento de estar donde estaba..
La mujeres de Sevilla menester que se compongan.. qué buenas las Sevillanas del Espartero.
Como dice Vulcano, hay un monográfico ahora en Madrid.. pero es verdad que no se ha acabado de poner esta figura en su sitio, mientras que a mi juicio se ha sobrevalorado a otras -Concha Piquer-.
Y Málaga tiene otro grande de la copla a quien no se le ha tratado como él merece: Miguel de los Reyes, maravilloso, fallecido hace unos años.
Un abrazo
jo, genial. hoy voy a ser yo quien te diga que qué más quieres que te diga... yo tb soy de esa generación de españoles que oímos hablar por primera vez de miguel de molina gracias a la peli de chávarri.
un "olvido" impuesto durante más de cuarenta años, que a algunos tb dejó en las cunetas. menos mal que hemos podido rescatar de ese maldito olvido a este pedazo de artista, como demuestras con este pedazo de homenaje.
un abrazo.
Vaya por delante que, aún siendo andaluz, no me mola en absoluto la copla, pero me parece admirable este hombre como persona y como artista cuya vida no he podido reconocer del todo, mientras te leía, en la película de Chávarri.
Las sevillanas del Espartero sólo las había escuchado a las niñas de mi barrio, allá por los 60. Realmente emocionante.
Recuerdo a mi abuela la de Jaén canturreando "La bien pagá". Decía que la cantaba "erdemolina" mejor que nadie. Y es verdad.
Es lo más reivindicable dentro de lo gay ke tenemos en este país. Y a valiente, no le ganó nadie.
Lo mejor; esos modelitos ke lucía, ke maremía...
Não conhecia nenhum dos personagens
" [...] su Málaga natal, que hoy trata de recuperar sus restos en el centenario de su nacimiento." ¿Acaso la pérdida no sirve para conmemorar la memoria? Como con Federico García Lorca y su exhumación... ¿Debemos poseer para recordar?
Muchas gracias, Pe-jota.
Que rica entrada.....
Uf.... dejas...frio., sin palabras.
Hola Jota:
Llego a tu blog, y me encuentro con este magnifico articulo sobre Miguel de Molina. Me ha encantado. Sin animo de querer enmendarte nada, según se cuenta, la persona que organizó la expulsión de España de Miguel de Molina, fue Luis Serrano Suñer.
Por lo demás, me quedo en tu blog, si me lo permites, para seguirte en el futuro.
Saludos.
Nació en el momento equivocado. Una lástima, porque era un genio.
Saludos.
"Ojos verdes" cantada por él suena especial.
Te ha quedado un homenaje entrañable, Pe-jota. Me ha encantado.
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