miércoles, junio 01, 2011

Werner Schroeter


"Todo cine ha de ser subversivo en relación a un público que se aferra a una historia y a una forma narrativa establecida: resulta más subversivo jugar con el contenido que con la estética de la imagen así como reencuadrar su perspectiva en un trabajo más lineal y neorrealista."
Werner Schroeter

El cineasta alemán Werner Schroeter (7 de abril de 1945, Georgenthal, Turingia, Alemania-12 de abril de 2010, Kassel), uno de los cineastas queer más importantes de Alemania en la década de 1970, moría el pasado 12 de Abril de 2010, justo una semana después de cumplir los 65 años.

"Werner Schroeter algún día tendrá el lugar que le corresponde en la historia del cine, que describiría lietrariamente como un lugar entre Novalis, Lautréamont y Louis-Ferdinand Céline, fuen un director "underground" durante diez años, y no quería dejar de serlo. El gran mundo cinematográfico limitó, reprimió y al mismo tiempo explotó despiadadamente la obra de Werner Schroeter. A sus películas se les dio la etiqueta cómoda de "underground", que los transforma en un flash, en hermosas plantas exóticas que florecían de forma inusual y lejana que en el fondo uno no podía sentirse molestado por ellas, y por lo tanto se supone que nadie se molestaba con ellas. Y eso es precisamente tan malo como estúpido. Para Werner Schroeter las películas no son algo lejano, sino algo hermoso, pero no exótico".
Rainer Werner Fassbinder, Frankfurter Rundschau, 24 February, 1979

Werner Schroeter con Rosa von Praunheim

Schroeter empezó a hacer cine a finales de la década de 1960 en colaboración con otra importante cineasta queer Rosa von Praunheim, de esta época son: Grotesk-Burlesk-Pittoresk (1968) y el corto Sisters of the Revolution (1969) de Praunheim en el que trabajó Schroeter.
En 1969 con su flamante 16 mm. rodará su primer largo Erika Katappa, película con la que obtuvo el premio Josef von Sternberg en el Manheim International Film Festival, y que lanzará su carrera. Es un periodo de experimentación el que Schroeter comienza a perfilar su sello personal, toma sus argumentos de la literatura, ópera, teatro, leyendas y cuentos de hadas. Contienen escenas recurrentes de amor, muerte y deseo como un intenso anhelo por algo o alguien que permanece inalcanzable o intangible.


En 1971 rodará la película "La Muerte de María Malibrán", considerada su obra más importante. Película en la que esboza la muerte de la famosa mezzosoprano del siglo XIX, pero sin dar demasiada importancia al elemento histórico.



Para Schroeter lo importante es mostrarnos una vida que se ha agotado, consumida por su propia intensidad, es un canto a la muerte. Uno se queda con la impresión de que para Schroeter, Malibrán podría haber muerto en cualquier lugar, siempre y cuando ella estuviera en el escenario cuando sucede.


En 1980, su película "Palermo oder Wolfsburg" (Palermo o Wolfsburg) ganó el Oso de Oro en el Festival de Berlín. Nicola, una joven víctima de la alta tasa de desempleo en Sicilia decide dejar Palermo y trasladarse a Wolfsburgo para encontrar trabajo. Con esta película nos invita a reflexionar sobre las diferencias culturales y como esas diferencias pueden separarnos.

"un ataque ideológico a la vida en este país (...) He conservado escenas estéticamente horribles, pero la caricatura es tal que todo se hace evidente... La primera parte, en Sicilia, es muy positiva... La segunda parte, en la Wolfsburg de Alemania, fue realizada con un espíritu muy negativo y raso contra este país. Lo que insinúo no es una opinión analítica de Alemania, sino un punto de vista agresivo"
Werner Schroeter


Der Rosenkönig (El rey de las Rosas), Albert (Mostefa Djadjam), un jardinero obsesionado con el cultivo de la rosa perfecta. Pero esta obsesión se ve desplazadas por una nueva obsesión, Fernando (Antonio Orlando), a quien sorprende robando las ofrendas devocionales de la pequeña capilla de la finca. Albert retendrá a Fernando en el establo, viniendo amorosamente todos los días para alimentarle y estar junto a él, todo ello bajo la atenta mirada de desaprobación de su madre (Magdalena Moctezuma).



Una película con marcadas referencias iconográficas al homoerotismo sobretodo hacia el final con imágenes que recuerdan la iconografía de San Sebastián en un intento de crear el ideal romántico de la belleza perfecta.


"En lugar de una historia, hay fragmentos. En lugar de una narración, esta película es una "cámara-poema de tres cuerpos, tres voces."
Karsten Witte


Schroeter que siempre ha escrito o coescrito la mayoría de sus largometrajes, hace una excepción con "Malina" (1991) basada en la novela de la autora feminista austriaca Ingeborg Bachmann, adaptada a la pantalla por Elfriede Jelenik y protagonizada por Isabelle Huppert y Mathieu Carrière.


Schroeter utiliza imágenes de espejos y fuego a fin de transmitir la idea de identidad en medio del caos y la crisis y crea una sensación palpable de asfixia a través de la repetición de escenas con la protagonista que tiene que acordarse de respirar. "Tengo que respirar, tengo que respirar", se dice a sí misma en varios momentos a lo largo de la película.


En "Poussières d'amour" Schroeter vuelve de nuevo al culto de la diva, tema que ya había tocado en 1968 con "Callas, Walking Lucia" y en En 1971 con "La Muerte de María Malibrán", pero esta vez se está de una forma directa, encarando la respiración, el canto y el envejecimiento de las divas, tomando como punto de partida una pregunta formulada por Roland Barthes en un breve ensayo titulado "La canción romántica.": ¿cómo encuentran las cantantes la emoción en sus voces? Para intentar responder a esta pregunta Schroeter invitó a algunos de sus más admiradas cantantes de ópera, jóvenes y viejas, a una abadía del siglo XIII en ruinas en Francia para ensayar un aria y hablar sobre el canto, el amor y las relaciones con Isabelle Huppert y Carole Bouquet.


Su última película "Nuit de chien". Protagonizada por Pascal Greggory, Bruno Todeschini, Amira Casar, Jean-François Stévenin y Bulle Ogier. Una fábula barroca, crepuscular e incluso políticamente poética, una película como toda su filmografía poco convencional, una especie de cuento de simbolista político. Se supone que tienen lugar en un país imaginario al borde del caos por un golpe militar, es una reflexión sobre la corrupción gubernamental, una metáfora sobre como los gobiernos acaban convirtiéndose en dictaduras infectados por el ansia de poder y dinero.

+Información:

http://www.werner-schroeter.com/
Werner Schroeter o la poesía contracultural
http://www.miradas.net/werner-schroeter.html
http://www.arte.tv/Werner Schroeter, l'inédit
Gifts After Death: The Photos of Late Filmmaker Werner Schroeter
Conversation entre Michel Foucault et Werner Schroeter

6 comentarios:

Joaquinitopez dijo...

Desgraciadamente no he visto ninguna de sus obras pero lo he de corregir.
Un abrazo

senses and nonsenses dijo...

gracias, interesantísimo post.
no había oído hablar de él siquiera. de Rosa von Praunheim ya he visto cosas.
investigaré, te lo prometo.

un abrazo.

MM de planetamurciano dijo...

Es la primera vez ke conozco el trabajo de este hombre, ke hasta ahora, ni plin.

El Deme dijo...

No conocía a este director, por eso me ha resultado interesante todo lo que he leído. Y saber que Isabelle Huppert trabajó con él.

Pilar dijo...

Poesía en el cine, maravilloso. No lo he visto, es una propuesta muy interesante. Gracias, pjota, me encantan estos descubrimientos. Besicos

Xavier dijo...

Me ocurre lo mismo que Joaquinitopez, tomare nota de los títulos que refieres.